Reclamar cláusula suelo
Si firmaste una hipoteca en los últimos años, es posible que estés pagando más de lo justo por culpa de una cláusula suelo. La buena noticia es que muchas de ellas han sido declaradas abusivas por los tribunales. Por eso, reclamar cláusula suelo se ha convertido en un derecho para miles de personas en España.
¿Qué es la cláusula suelo?
La cláusula suelo es una condición incluida en muchos préstamos hipotecarios a interés variable que establece un límite mínimo a pagar en las cuotas, aunque el índice de referencia (como el Euríbor) esté por debajo de ese valor.
Este tipo de cláusulas fueron muy habituales en España, sobre todo antes de la crisis financiera de 2008. El problema es que muchas veces se incluyeron sin que el cliente fuera correctamente informado, lo que ha llevado a que los tribunales las consideren abusivas cuando no hubo transparencia. A raíz de diversas sentencias, miles de consumidores han podido recuperar su dinero tras reclamar cláusula suelo.
¿Qué se puede reclamar?
Si tu hipoteca contiene una cláusula suelo y no se te explicó con claridad su funcionamiento o sus consecuencias, puedes reclamar la devolución de las cantidades pagadas de más. Esta reclamación puede incluir:
- La devolución íntegra del dinero pagado de más desde que se empezó a aplicar la cláusula.
- Los intereses legales sobre esas cantidades.
- La eliminación de la cláusula suelo del contrato hipotecario.
Reclamar cláusula suelo puede suponer un ahorro significativo, y es posible incluso si ya has terminado de pagar la hipoteca, siempre que no haya prescrito el plazo legal. En Resuelve Mi Deuda ayudamos a nuestros clientes a recuperar lo que les pertenece.
¿Cuánto cuesta reclamar las cláusulas suelo?
Reclamar cláusula suelo no tiene por qué suponer un gasto elevado si eliges el acompañamiento legal adecuado. Actualmente, muchos despachos ofrecen modelos de pago a éxito, lo que significa que solo cobran si tú ganas. Esto reduce al mínimo el riesgo económico para el afectado.
En la mayoría de los casos, los costes se calculan como un porcentaje del importe recuperado. Este porcentaje puede variar, pero suele oscilar entre el 10% y el 20% más IVA. Además, hay situaciones en las que los honorarios pueden ser cubiertos por el banco si así lo determina la sentencia judicial.
En Resuelve Mi Deuda, te acompañamos durante todo el proceso con absoluta transparencia. Nuestro equipo especializado valora cada caso de manera personalizada y te informa desde el primer momento de los posibles costes y condiciones, sin sorpresas. Si has sido víctima de una cláusula suelo abusiva, recuperar tu dinero está al alcance, y no tiene por qué ser complicado ni costoso.
Reclamar cláusula suelo – Preguntas Frecuentes
¿Cómo sé si tengo cláusula suelo?
Puedes identificarla revisando tu escritura hipotecaria. Busca expresiones como “límite mínimo”, “tipo mínimo aplicable” o “tipo de interés no podrá ser inferior al X%”. También puedes comprobar si tu cuota mensual no ha bajado pese a la bajada del Euríbor. Ante la duda, lo mejor es que un abogado revise tu contrato.
¿Se puede reclamar cláusula suelo si ya terminé de pagar la hipoteca?
Sí, se puede reclamar cláusula suelo incluso si la hipoteca ya está saldada. El plazo para reclamar depende del momento en que supiste o debiste saber que la cláusula era abusiva, por lo que cada caso debe analizarse individualmente.
¿Cuánto dinero puedo recuperar?
La cantidad depende del tiempo que estuvo activa la cláusula y del importe de tu hipoteca. En muchos casos, los afectados recuperan entre 3.000 y 15.000 euros, aunque puede ser más.
¿Puedo reclamar sin ir a juicio?
Sí. Muchos bancos ofrecen acuerdos extrajudiciales, especialmente desde que el Tribunal Supremo y el Tribunal de Justicia de la Unión Europea han fallado a favor de los consumidores. Sin embargo, es importante revisar bien estos acuerdos con un abogado, ya que a veces el banco ofrece menos dinero del que realmente corresponde.
¿Cuánto tiempo tarda el proceso?
Depende de si el proceso es extrajudicial o judicial. Una reclamación amistosa puede resolverse en unos meses. Si se llega a juicio, puede tardar de 6 a 12 meses. En ambos casos, contar con un equipo legal acelera los trámites y mejora las posibilidades de éxito.