La historia de Silvia: cómo logró cancelar deudas con LSO y recuperó la tranquilidad
Silvia vive en Girona, tiene una hija y trabajaba en una empresa de limpieza de oficinas. Todo iba bien hasta que, de un día para otro, recibió una llamada inesperada: la empresa cerraba y, en cinco días, perdería su trabajo.
Tras tres años trabajando, Silvia se quedó sin empleo y, peor aún, sin recibir su última nómina. Para cubrir los gastos básicos, tuvo que pedir un micropréstamo y comenzó a vivir una situación que parecía no tener salida.
Una deuda que creció mes a mes
Con el paro como único ingreso, Silvia intentaba cubrir el alquiler, los gastos de su hija y los servicios básicos. Pero el dinero no alcanzaba y el banco le negó financiación al estar desempleada, así que recurrió a un préstamo personal con una entidad privada.
“Comencé a acumular préstamos porque no podía pagar el alquiler y nuestros gastos solo con el paro. Muchos de los préstamos que solicité tenían intereses muy altos, que agrandaron más la deuda y la desesperación.”
– Silvia, clienta de Resuelve Mi Deuda
La situación se complicó aún más: sin encontrar trabajo y con los intereses de los micropréstamos acumulándose, Silvia tuvo que pedir otro préstamo para pagar el adelanto a un abogado que la ayudaría a reclamar su indemnización. El problema es que este proceso llevaría meses y las facturas no esperaban.
Un círculo vicioso sin salida
Al segundo mes sin trabajo, Silvia dejó de pagar las cuotas de los préstamos. Las llamadas para reclamar los pagos eran constantes y los intereses seguían creciendo. Para subsistir, comenzó a realizar trabajos de limpieza por horas, aunque no eran suficientes para cubrir la deuda.
Finalmente, Silvia encontró un nuevo trabajo. Sin embargo, dejar los pequeños trabajos por horas para centrarse en su nueva jornada laboral la dejó sin liquidez hasta fin de mes. Para superar este bache, no le quedó más remedio que pedir otro micropréstamo.
Fue en ese momento cuando se dio cuenta de que, incluso con su nueva nómina, no podría hacer frente a todas las deudas pendientes.
La solución: cancelar deudas con LSO
En su nuevo trabajo, una compañera le comentó que su madre había conseguido eliminar sus deudas gracias a la Ley de Segunda Oportunidad. Silvia sintió que, por fin, había encontrado la solución que necesitaba y no dudó en contactar con nuestro equipo de Resuelve Mi Deuda.
“Me sentí muy acompañada en este duro proceso, y me ayudaron a recomponer mi situación.”
– Silvia
Un nuevo comienzo para Silvia
Gracias a la herramienta de cancelar deudas con LSO y al apoyo de nuestro equipo, logramos exonerar más de 8.000 euros en microcréditos y préstamos personales. Ahora, Silvia ha recuperado el control de sus finanzas y puede respirar tranquila.
Si estás en una situación similar, hay esperanza
La historia de Silvia demuestra que, incluso cuando parece no haber salida, la Ley de Segunda Oportunidad puede ayudarte a cancelar tus deudas y empezar de nuevo. En Resuelve Mi Deuda nos encargamos de guiarte en este proceso, ofreciéndote el apoyo que necesitas para recuperar tu tranquilidad.
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